Boquete es uno de los tantos pueblos pintorescos y verdes de la provincia de Chiriquí en Panamá. Se ubica en la frontera con Costa Rica y está escondido entre montañas, flores de diversos colores y un inconfundible aroma de café. Entre sus casas y fincas se encuentran senderos de todos los niveles que invitan a recorrer bosques lluviosos. Además, en los alrededores de este pueblo se encuentran el Parque Internacional La Amistad (PILA) y el Parque Nacional Volcán Barú, que son zonas protegidas y reservas naturales.
De hecho, Boquete se considera el principal destino montañoso de Panamá y uno de los más preferidos por turistas de varias partes del mundo, que no solo lo ven como un pueblo para vacacionar sino como una buena opción para el retiro.
Volcán Barú
Para los amantes del turismo de aventura, una de las paradas obligadas es sin duda, el Parque Nacional Volcán Barú, donde por supuesto, se encuentra el imponente volcán Barú, que está inactivo y tiene más de 3 mil 400 metros de altura.
Este volcán ofrece una flora y fauna excepcionales, pero además, los turistas quedan impresionados con las espectaculares vistas. Según se suele afirmar, es el único lugar del mundo donde, en los días más claros, se pueden ver los océanos Atlántico y Pacífico al mismo tiempo.
La tierra circundante al volcán alberga 5 ecosistemas diferentes. Esta maravilla de la naturaleza se produjo gracias a una combinación de regiones montañosas de selva tropical, así como, a las consecuencias de erupciones volcánicas que ocurrieron hace millones de años.
Asimismo, el volcán Barú tiene 7 cráteres y varias rutas de senderismo que conducen hasta su cima. Desde Boquete, se puede subir el volcán en una camioneta todoterreno para llegar a la cima en aproximadamente 90 minutos. Por supuesto, quienes quieran una experiencia más desafiante puden caminar unas cuantas horas por un sendero largo pero hermoso.
Sendero Los Quetzales
Una de los tantos senderos que atraviesan el volcán Barú es el de Los Quetzales. Se trata de uno de los caminos más conocidos que conecta a Boquete con otro pueblo de Chiriquí llamado Cerro Punta. Se trata de una caminata de 9,6 kilómetros de aventura, que aproximadamente son 4 horas de recorrido.
Excursionistas experimentados, recomiendan realizar esta caminata con guía que indique el camino. En el sendero se pueden apreciar lugares impresionantes, como puentes colgantes mágicos y un avistamiento de quetzal, el ave más mítica y colorida de la región. Según una leyenda, es más fácil de observar al quetzal en la provincia de Chiriquí que en cualquier otro lugar de su existencia en Centroamérica.
El Café de Boquete
En este pintoresco pueblo se producen las condiciones necesarias para la siembra de un café de alta calidad. Boquete, cuenta con alturas entre los mil y 2 mil metros sobre el nivel del mar, suelos fértiles de origen volcánico enriquecidos con nutrientes del bosque tropical y un microclima especial con temperatura estable.
De hecho, en Boquete se encuentra la finca más antigua de la región, donde los turistas pueden conocer la importancia de las aves para la protección del café. Además, se pueden visitar otras fincas con proyectos de sostenibilidad, que ofrecen un sinfín de actividades de aventura.
En muchas de estas fincas, se les permite a los visitantes, observar los granos rojos brillando en la planta y a los trabajadores recogiendo el fruto. También pueden aprender a plantar, cultivar, recoger, pelar, lavar y secar el café.
Parque Internacional La Amistad
El Parque Internacional La Amistad es otro destino turístico que se encuentra a las afuera de Boquete y que indudablemente merece la pena visitar. Se trata de un parque natural protegido por Panamá y Costa Rica, donde el contacto con la naturaleza está más que garantizado.
Según se suele afirmar, este parque es la reserva natural más grande de Centroamérica y cuenta con un impresionante bosque tropical de más de 400 mil hectáreas ubicado en la cima de la Cordillera Central.
Su biodiversidad, rica en flora y especies animales variadas, únicas de la zona, lo convierten en uno de los destinos favoritos para los amantes de la naturaleza. En 1983, la UNESCO nombró al Parque Internacional La Amistad como Patrimonio de la Humanidad, por su asombrosa diversidad de vida vegetal y animal.
Con sus caminos verdes y su particular café, Boquete es uno de los pueblos mágicos más espectaculares de América Central. De hecho, algunos la conocen como la pequeña Suiza, aunque por supuesto, con costumbres muy latinas.
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