Chignahuapan, México

Chignahuapan, el pueblo donde se fabrican esferas de Navidad

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Chignahuapan es el nombre de un pueblo mágico del norte del estado de Puebla, en México, que en náhuatl quiere decir: “sobre las nueve aguas”. Vale la pena destacar que, este territorio fue habitado por la cultura totonaca, antes de la invasión española.

Se trata de un pintoresco pueblo cargado de casas tradicionales, templos y jardines. Además, Chignahuapan es conocido por su producción de esferas navideñas, cuya presencia no pasa desapercibida por las calles de este destino mexicano.

Las esferas navideñas de Chignahuapan

Para muchos turistas mexicanos y extranjeros, Chignahuapan es uno de los destinos más visitados de todo México en la época navideña. Esto se debe a que en este lugar los artesanos producen a mano, las famosas esferas que adornan los árboles de Navidad de muchos hogares dentro y fuera de ese país.

Según se suele afirmar, en este pueblo se producen esferas desde 1965. Todo comenzó cuando un artesano de nombre Rafael Méndez instaló los primeros talleres de elaboración de esferas. Algunos lugareños comentan que Méndez aprendió la técnica en Michoacán y la llevó a hasta Chignahuapan, donde otros artesanos adquirieron tal habilidad. El resultado fue que el pueblo se convirtió en la fábrica artesanal de las esferas navideñas.

Se estima que entre los cientos de talleres y fábricas artesanales, se elaboran aproximadamente 80 millones de esferas cada año.

El Festival de la Luz y la Vida

Una de las festividades más importantes de este pueblo, es por supuesto el Día de Muertos (1 y 2 de noviembre), celebración que tiene gran importancia en México. Motivado a este día, en el pueblo se realiza el Festival de la Luz y la Vida, iluminando con antorchas la Laguna de Chignahuapan.

Festival de la Luz y la Vida

Vale la pena destacar que, este festival surgió de un ritual prehispánico a través del cual se buscaba la purificación del alma. La celebración comienza en la noche en la plaza principal del pueblo iluminado con velas. Las personas recorren la denominada Calzada de las Almas con antorchas en mano. El recorrido se realiza desde la Parroquia de Santiago Apóstol hasta la orilla de la laguna. Se trata de una representación del viaje de la muerte hasta llegar al Mictlán.

La Pirámide de Mictlán

La Pirámide de Mictlán se encuentra dentro la Laguna de Chignahuapan y evidentemente es una de las paradas obligadas de este destino. Asimismo, esta pirámide forma importante del Festival de la Luz y la Vida, debido a que se le considera un elemento distintivo y místico.

En la cosmovisión mexica, Mictlán es el inframundo y la pirámide se relaciona con los rituales funerarios y la creencia en el más allá. Por lo tanto, esta pirámide flotante, es uno de los principales escenarios del festival.

El Kiosco de Chignahuapan

Otro atractivo turístico de este mágico lugar, disfrutado por propios y visitantes, es el denominado kiosco municipal que se ubica en su centro histórico. Para muchos, es como hacer una parada en el tiempo. Algunos lugareños y turistas suelen remojar sus manos en el agua que brota de la fuente debajo del kiosco. Anteriormente se creía que esta agua era sagrada y pura para todo el que la bebiera.

El Kiosco de Chignahuapan

Algo que también llama la atención de los turistas, es que el kiosco tiene una luna en cuarto menguante sobre su techo que según los lugareños, custodia todo el pueblo.

Santuario del Honguito

El Santuario del Honguito es un templo pequeño que cuenta con un detalle peculiar. El templo alberga un hongo petrificado, que fue encontrado en 1880. Algunos devotos aseguran ver imágenes religiosas en su superficie, entre ellas la de un Cristo Crucificado, al que llaman Nuestro Señor del Honguito.

Santuario del Honguito

En la actualidad, el santuario se llama oficialmente, Nuestra Señora del Sagrado Corazón de Jesús. De hecho, frente del recinto se puede observar una estatua del Sagrado Corazón de Jesús.

Cascada de Quetzalapan

En las afueras de Chignahuapan se encuentra el salto de Quetzalapan, una de las cascadas más grandes de la sierra norte mexicana. La cascada tiene una caída de 100 metros sobre una poza de aguas termales. Está alimentada por el río del mismo nombre que viene de la Laguna de Chignahuapan y para llegar a la caída hay que descender 365 escalones de piedra.

Cascada de Quetzalapan

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