Considerado el primer cantante venezolano en llegar a Hollywood y también el primero en cantar en la extinta Unión Soviética. Alfredo Sadel fue para muchos el cantante popular y lírico más importante de Venezuela y Latinoamérica de los años 40 y 50.
Su imponente voz, también lo llevó a presentarse en escenarios de España, México, Italia, Cuba, Colombia y por su puesto de su natal Venezuela.
Fue uno de los cantantes más destacados que pasaron por la Orquesta Billo’s Caracas Boys. Además, realizó dúos con artistas de renombre internacional como el maestro cubano Benny Moré, “el bárbaro del ritmo”.
Musicalmente, Alfredo Sadel interpretó varios géneros de la canción latinoamericana. Pero sin duda, el bolero predominó entre los pasajes, el vals y el pasodoble.
Inicios de Alfredo Sadel
Nació el 22 de febrero de 1930 en la parroquia San Juan de la capital venezolana. Su verdadero nombre era Manuel Alfredo Sánchez Luna, pero amigos y gente del mundo de la música, le aconsejaron cambiar su nombre porque su apellido era muy común en el medio artístico. El cantante tomó entonces la primera sílaba de su apellido SA y le agregó DEL, última sílaba del apellido de su ídolo: Carlos Gardel.
Según se suele afirmar, la primera presentación de Alfredo Sadel fue en la Catedral de Caracas, donde impresionó al público, interpretando el Ave María.
Inició su formación musical a los 16 años en la Escuela Superior de Música de Caracas. Continuó sus estudios en Ciudad de México, Nueva York, Buenos Aires, Barcelona, Salzburgo y Milán. Ya era un cantante nato, sin embargo, su amplia formación lo convirtió en un experto en solfeo, piano, armonía y composición.
En 1947, Sadel se presentó en la icónica plaza de toros Nuevo Circo de Caracas, dejando a todos emocionados con su voz de tenor y su pinta de galán de cine. Vale la pena mencionar que, antes de aquella actuación, ya había ganado bastante popularidad a través de diversos programas radiales.
Pero fue luego de aquella apoteósica presentación en Nuevo Circo, que se abrieron las puertas del éxito para Alfredo Sadel. En 1951, firmó contrato con RCA Victor para grabar una producción musical en Nueva York.
Alfredo Sadel y su paso por el Cine Latinoamericano
Además de la música, Alfredo Sadel incursionó en la actuación, participando en varias películas tanto en Venezuela como en México y otros países. Entre la producciones cinematográficas que participó, destacan “Flor del campo”, “A la Habana me voy”, “El Ratón” y “Tres balas perdidas” entre otras.
El éxito de “Mi canción”
En 1955, Alfredo Sadel grabó su primer disco de larga duración titulado “Mi canción”, considerado por los críticos, una joya musical. En este trabajo se incluyen los temas “Mi canción”, de María Grever, “Traición”, de Ernesto Lecuona, “María Elena”, de Lorenzo Barcelata e “Incertidumbre”, de Gonzalo Curiel entre otros.
También se encuentran las canciones “Morena Linda”, de Rafael Hernández, “Tu retrato”, de Agustín Lara, “Frenesí”, de Alberto Domínguez, “Amor de mis amores”, de María Teresa Lara y “Desesperanza”, de María Luis Escobar.
Un par de años después de haber grabado este disco, siendo ya un consagrado artista internacional, se presentó en el programa de televisión más popular del momento en Venezuela, “el Show de las doce”. En ese entonces, Venezuela se encontraba bajo la dictadura de Marcos Pérez Jiménez y Sadel decidió interpretar “Escríbeme” un tema de Guillermo Castillo Bustamante, que era un preso político de la dictadura.
El tema fue escrito en la cárcel de Ciudad Bolívar y claramente era una bofetada a la dictadura perezjimenista. Dadas las circunstancias, luego de aquel acto que se consideró un gesto solidario, Sadel se fue del país.
La ópera de Alfredo Sadel
A partir de la década de los 60, el cantante venezolano apostó por el canto lírico y presentó La zarzuela Los gavilanes” en el teatro Nacional de Caracas.
Años más tarde, Alfredo Sadel intentó institucionalizar la ópera en Venezuela, por lo que organizó una gran temporada de presentaciones en la Universidad Central de Venezuela, que luego se extendió por todo el país.
En 1985, se mudó a Nueva York, donde realizó numerosas presentaciones. Sin embargo, se mantenía viajando a Colombia y Venezuela, donde indudablemente tenía un público que lo quería mucho.
Luego de realizar una serie de conciertos en varias ciudades colombianas y venezolanas, el destacado cantante y compositor Alfredo Sadel falleció el 28 de junio de 1989 en Caracas, Venezuela.
Sus más 2 mil canciones grabadas a lo largo de toda su trayectoria, conforman su legado musical, todavía vigente en toda Latinoamérica.
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