La felicidad es una decisión y a su vez un derecho universal de todos los seres humanos. De hecho, algunos expertos suelen afirmar que, la felicidad forma parte del desarrollo y el bienestar de la humanidad.
Precisamente para promover la importancia de esta emoción, el 20 de marzo de cada año se celebra el Día Internacional de la Felicidad, proclamado por la ONU con el propósito de garantizar inclusión, equidad, bienestar colectivo e igualdad social en las sociedades del mundo.
Bután y el Día Internacional de la Felicidad
Fue precisamente en Bután, un pequeño país del sur de Asia, ubicado en las montañas del Himalaya, donde se propuso dedicarle un día a la felicidad. La idea surgió hace más de 40 años, cuando el rey de Bután decidió que la filosofía de su gobierno se basara en la felicidad de su pueblo. Por tal motivo, inventó el concepto de Felicidad Nacional Bruta (FNB), en vez del Producto Interno Bruto.
La FNB se calcula midiendo 9 puntos: el bienestar psicológico, el uso del tiempo, la vitalidad de la comunidad, la cultura, la salud, la educación, la diversidad medioambiental, el nivel de vida y el Gobierno.
Aunque está considerado como uno de los países menos desarrollados, Bután, cuya religión oficial es el budismo, es también conocido como uno de los países más felices del mundo. Para los butaneses, la felicidad va más allá de una simple emoción o una alegría pasajera por obtener algo deseado. En Bután, hablar de felicidad es hablar de satisfacción con la vida y con el todo.
Semana Mundial del Dinero
Aunque no debería ser un indicativo de felicidad, no es un secreto para nadie que el dinero puede contribuir a que seamos más felices. Sin embargo, no es lo único que aporta felicidad a nuestras vidas.
Aclarado esto, abordamos nuestro segundo punto de este post: la Semana Mundial del Dinero o Global Money Week, que este año se celebra del 17 al 23 de marzo. Esta iniciativa surgió para crear conciencia en la población sobre el buen uso del dinero y las decisiones financieras acertadas. De igual forma, es esta semana se promueve una educación financiera para todo el mundo, inclusive, para niños y adolescentes.
Origen de la Semana Mundial del Dinero
La primera Semana Mundial del Dinero se realizó en el año 2012 y fue organizada por la Red Internacional de Educación Financiera (INFE), adscrita a la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE). Desde entonces Su principal objetivo ha sido crear campañas a nivel mundial de concienciación y hábitos de los denominados ahorros inteligentes en la población, esencialmente en niños y jóvenes. De hecho, se suele afirmar que, estas campañas han llegado aproximadamente a 53 millones de niños y jóvenes, en 176 países alrededor del mundo.
Vale la pena mencionar que, en estas actividades participan instituciones financieras, educativas, expertos en finanzas y otras empresas.
La importancia del ahorro
En una cultura consumista como la que vivimos en la actualidad, parece difícil tener un plan de ahorro. Sin embargo, no es una misión imposible. De hecho, el ahorro se considera algo fundamental para alcanzar la estabilidad financiera y un futuro más seguro.
Contar con un fondo de emergencia, por ejemplo, puede salvarnos de algún imprevisto que surja de repente. Pero además de protegernos de situaciones inesperadas, el ahorro nos ayuda a cumplir metas y objetivos a corto, mediano y largo plazo. Comprar una propiedad, emprender un negocio o realizar un viaje soñado, puede ser el resultado de un buen plan de ahorro.
De acuerdo con expertos financieros, el ahorro no se trata solo de guardar lo que sobra, sino de planificar y priorizar gastos de manera inteligente. En este sentido, tener pequeños hábitos, como destinar un porcentaje fijo de nuestros ingresos para el ahorro, así como evitar compras compulsivas, puede generar un impacto significativo a largo plazo. Por supuesto, es necesario ser disciplinados y constantes para desarrollar con éxito una cultura de ahorro.
A continuación, mencionamos algunos consejos prácticos para ahorrar dinero:
Metas claras: Es importante definir el por qué o para qué se está ahorrando dinero, ya que tener objetivos específicos nos motivará a ser más constantes.
Presupuesto: Asimismo, debemos tener un registro detallado de nuestros ingresos y gastos mensuales para identificar en qué áreas podemos reducir gastos que sean innecesarios y destinar ese dinero al ahorro.
Ahorrar primero y gastar después: Antes de comenzar a gastar, algunos expertos recomiendan destinar al ahorro el porcentaje acordado al momento de recibir nuestro ingreso.
Salir de deudas: Las deudas pueden jugar en contra del ahorro, por lo tanto es importante priorizar el pago de deudas.
Descuentos y ofertas: De igual forma, es importante comparar precios antes de comprar y buscar promociones y descuentos. Estos pequeños ahorros en compras cotidianas pueden sumar grandes cantidades con el tiempo.
Evitar gastos innecesarios: Antes de comprar cualquier cosa, debemos preguntarnos si realmente lo necesitamos o si podemos posponer esa compra. Definitivamente, evitar gastos innecesarios nos ayudará a ser más disciplinado con nuestro plan de ahorro.
Tener un fondo de ahorro puede evitarnos momentos de estrés y angustia. Asimismo, cumplir nuestras metas gracias a nuestro plan de ahorro puede generarnos felicidad y bienestar emocional.
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