Recife, ubicada en el estado brasileño de Pernambuco, es una las tantas ciudades mágicas del denominado gigante suramericano. Un lugar cargado de historia y cultura que atrapa hasta al más exigente de los turistas.
La ciudad se encuentra en pleno litoral y de hecho su hermosa costa es uno de los principales atractivos turísticos. La Playa de Boa Viagem, con sus aguas de azul turquesa, es una de las más conocidas de Brasil.
Sin embargo, no todo es color de rosa, ya que según se suele afirmar, el litoral de Recife posee un gran índice de ataques de tiburones, por lo que es normal ver avisos de advertencia a lo largo de toda la playa. Curiosamente, los escualos es lo que más atrae a los turistas que visitan las playas de esta ciudad. Indudablemente, lo más recomendable es pasear por la playa sin sumergirse en el mar.
Por supuesto, tiburones no es lo único que ofrece Recife, ya que además de playas, esta ciudad brasileña es rica en cultura, gastronomía, arte y patrimonio histórico. En este sentido, otro de los puntos favoritos es el centro histórico de la ciudad, conocido como Recife Antiguo, donde por cierto, se encuentra la mayor parte de atractivos culturales.
Recife Antiguo
El casco antiguo de Recife, conocido como Recife Antiguo o Antigo, es uno de los destinos obligados de esta ciudad. Se ubica en la orilla del río Capibaribe y su laberinto de estrechas calles adoquinadas y edificios coloniales forman parte de la magia de este lugar.
Además de los sitios llenos de historia, Recife Antiguo cuanta con una muy activa vida nocturna que incluye, discotecas, bares, restaurantes, tiendas y hasta un centro de alta tecnología llamado Porto Digital.
Plaza Marco Zero
La plaza Marco Zero es uno de los puntos más emblemáticos de la ciudad. De hecho se considera el punto de partida de Recife Antiguo y llama la atención por su gran rosa de los vientos estampada en el suelo. A su alrededor se pueden observar varios edificios coloniales muy bien conservados.
Además de la flor estampada, en esta plaza se encuentra el letrero de Recife, que indudablemente invita a tomarse fotos para recordar la visita.
Desde esta plaza, se puede tomar un bote para ir a la isla donde se ubica el increíble Parque de las Esculturas Francisco Brennand.
Fuerte de las 5 puntas
Esta impresionante fortaleza se construyó en 1630 por los holandeses que ocuparon esa región. En aquella época, se utilizaba como una estructura de defensa. Hoy en día es un centro cultural, donde se realizan eventos con mucha frecuencia.
Además, en el Fuerte de las 5 Puntas se encuentra un museo que cuenta la historia de esta fortaleza y de Pernambuco.
Recibió el nombre, debido a su forma de estrella, sin embargo, quienes lo han visitado aseguran que el fuerte solo tiene 4 puntas. Esta hecho de paredes de piedra y torres de vigilancia, desde donde se puede observar el puerto y el río Capibaribe.
Casa de los Muñecos Gigantes
En la calle de Bom Jesús, se encuentra la Casa de los Muñecos Gigantes, un sitio donde se exhiben los muñecos que desfilan por todo Pernambuco durante los días de carnaval. Dichas figuras, representan personajes famosos de Brasil y el mundo.
Algunos de los personajes representados en estos muñecos son: Neymar, Pelé, Messi, Sócrates, Roberto Carlos, Michael Jackson y Bob Marley entre otros.
Casa de la Cultura de Recife
Otro lugar interesante de Recife Antiguo es la Casa de la Cultura, que sin lugar a dudas es una de las paradas obligadas de esta ciudad. Se trata de una antigua cárcel que se convirtió en centro cultural, conservando las celdas de la antigua prisión. En total son 3 galerías de celdas, cada una con 3 pisos interconectados por escaleras empinadas.
Justo al frente de la Casa de la Cultura, se encuentra el Museo del Tren, donde se pueden observar algunos ejemplares de la historia ferroviaria de Brasil.
Una ciudad completa, donde el arte, la historia y la cultura se desbordan por todos lados.
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