Cedros es un pueblo mágico de Honduras, que ofrece paisajes inigualables tanto a propios como a visitantes. Se trata de un pintoresco lugar con clima agradable y gente amable que se encuentra relativamente cerca de Tegucigalpa, la capital hondureña.
Tratándose de un lugar que se llama Cedros, no es de extrañar que una de las primeras cosas que se observen sean sus abundantes cedros. Además de la abundancia y el aroma de este tipo de árbol, el pueblo llama la atención por sus calles empedradas, sus casas coloniales y su olor a pino y café.
De hecho, se suele afirmar que, la historia de este pueblo mágico se refleja en sus enormes viviendas de adobe y tejas, que dan la sensación de vivir en el pasado.
El mirador de Cedros
Uno de los destinos favoritos de Cedros es el mirador que se encuentra en El Cerrito, en las faldas del pueblo. Para llegar a la cima, lo visitantes deben subir más de 50 gradas. Por supuesto, el esfuerzo vale la pena, ya que el mirador ofrece una espectacular vista paradisíaca, desde donde se puede observar la icónica Iglesia de San José, las coloridas casas de antaño y por supuesto, los cedros.
Cerro El Zacatal
Otro lugar escogido sobre todo por los amantes del turismo de aventura, es el famoso cerro El Zacatal, el cual está rodeado de historias míticas. Los pobladores de Cedros aseguran que este cerro es uno de los puntos más altos del pueblo. También se suele afirmar que, sus rocas son tan grandes que al caer podrían destruir totalmente a Cedros. Sin embargo, para muchos cedreños, esto es solo una leyenda.
La Iglesia de San José de Cedros
Al tratarse de un pueblo que conserva su estilo colonial, su iglesia es otra de las paradas obligadas para visitar, en especial para los amantes del turismo religioso. En este sentido, la Iglesia de San José, fundada entre los años de 1811 y 1812, relata en sus paredes la historia de este mágico lugar. La figura del Cristo Negro del Señor del Buen Fin, que se encuentra en este templo es venerada todos los días por fieles creyentes que dan fe de sus milagros. Asimismo, la fiesta patronal que se celebra desde el primero hasta el 22 de enero es uno de los eventos culturales y religiosos más importantes de Honduras, que atrae no solo a visitantes de otras partes de ese país, sino también de Guatemala, México y El Salvador.
La Casa de Álvaro Contreras
Además de los cerros y la Iglesia de San José, Cedros ofrece lugares históricos a sus visitantes. Tal es el caso de la Casa de Álvaro Contreras, un reconocido periodista que fue Secretario General de Honduras y director de La Gaceta en 1852, el primer periódico de ese país centroamericano, que todavía se mantiene en circulación. Vale la pena mencionar que, Contreras se convirtió en uno de los personajes más importantes de la historia hondureña gracias a su destacada labor y su legado dejado en libros. De hecho, desde 1982 existe el Premio Álvaro Contreras, que se otorga a periodistas que realizan una labor admirable.
Las lagunas de Cedros
Por otro lado, Cedros cuenta con varias lagunas, que según se comenta, son las que abastecen de agua a toda la comunidad. Una de las más conocidas, es precisamente la Laguna Cedros, que se encuentra escondida entre matorrales y rodeada de montañas. Se trata de una laguna de aproximadamente 8 metros de profundidad, que en años anteriores era una sábana, pero con el tiempo el agua se fue estancando y se convirtió en una de las lagunas más visitadas de este pueblo.
Otros sitios de interés
De igual forma, caminar por las calles empedradas y empinadas puede ser una buena opción para conocer un poco más de este hermoso pueblo. Al recorrer las calles se pueden observar a algunos lugareños trasladándose a caballo de un lugar a otro.
En la calle principal de Cedros se encuentra la vivienda en la que se realizó en 1824 la primera sesión del Congreso Nacional de Honduras. Fue precisamente en este lugar, hoy patrimonio cultural de ese país, donde se eligió a Tegucigalpa como capital hondureña.
También se pueden visitar las famosas bocaminas o boca de minas, que en tiempos anteriores fueron explotadas por sus minerales preciosos. Hoy en día, representan uno de los tantos atractivos turísticos de este lugar.
Cedros, un pintoresco pueblo con paisajes encantadores, donde la naturaleza contrasta con lo colonial.
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