Costa Rica, país que forma parte de nuestra serie América Latina y El Caribe y que conserva alrededor del 5% de la biodiversidad del planeta. Además de su ambiente salvaje natural, destaca su seguridad y ambiente tranquilo, siendo uno de los pocos países en el mundo sin tener un ejército.
Sus encantadores paisajes, su gente amable y sus maravillas naturales, convierten a Costa Rica en el lugar perfecto para disfrutar unas buenas vacaciones. Pero antes de adentrarnos en sus bondades turísticas vamos a repasar el pasado histórico de este país centroamericano.
Un poco de historia de Costa Rica
Según se comenta, entre los años 10mil y 7mil antes de cristo se instalaron las primeras poblaciones indígenas, quienes principalmente se dedicaron a la agricultura. Lograron constituir una sociedad bien formada hasta que en septiembre de 1502 -en su cuarto viaje- Cristóbal Colón llegó a lo que hoy se conoce como Costa Rica.
En un principio, Colón llamó al territorio Veragua, pero al recoger objetos de oro pertenecientes a los indígenas surgió el nombre de Costa Rica. Poco a poco, los pueblos originarios fueron desapareciendo por enfermedades o desplazamiento y los indígenas que permanecieron en estas tierras fueron evangelizados a la fuerza. Un patrón que se repitió por casi todo el continente.
En los años siguientes, al concretarse la conquista de América Central se fundó la Capitanía General de Guatemala. Dicha capitanía incluía a Costa Rica y a todos los estados centroamericanos a excepción de Panamá.
En 1821, todos los estados pertenecientes a la Capitanía General de Guatemala logran la independencia de España pero inmediatamente comienzan a formar parte del naciente imperio mexicano. Posteriormente se creó la República Federal de Centroamérica, de la que Costa Rica formó parte hasta 1838, año en el que finalmente se convierte en un estado independiente.
¿Qué visitar en Costa Rica?
Actualmente Costa Rica es considerado uno de los países más ecológicos del mundo, el cual genera más del 95% de su electricidad a través de energía renovable. Al concentrar el 5% de la biodiversidad del planeta como ya habíamos mencionado anteriormente, le viene muy bien la frase ¡Pura Vida! Expresión muy común en esa nación. La belleza de su naturaleza se puede apreciar en San José, su capital donde también se pueden recorrer los restos de su pasado colonial.
Algunos lugares para pasear por la capital costarricense son: la Plaza de la Soledad, el Teatro Nacional, la catedral metropolitana y entre otros el Mercado Central. Este último, fue fundado en 1880 y desde entonces se pueden encontrar desde hierbas medicinales, flores, carnes hasta café costarricense y recuerdos artesanales.
A veinte kilómetros de San José se encuentra uno de los tantos parques naturales de Costa Rica. Se trata del parque Braulio Carrillo, un hermoso bosque donde predominan la humedad y la vegetación verde. Pero además, en este lugar se encuentra una gran variedad de fauna, siendo el mayor atractivo sus diferentes tipos de aves.
Playas
Las playas de Costa Rica se dividen entre el Océano Pacífico y el Mar Caribe. Del lado del Pacífico, las playas son más desérticas y sus olas pueden alcanzar más de cuatro metros de altura. Algunas de las más conocidas son: Conchal, Flamingo, Papagayo, playa Grande, Sámara y Jacó.
Por su parte en la costa Caribe, las palmeras llegan casi hasta el agua que es mucho más serena y cristalina. De este lado se pueden visitar playas como Puerto Viejo, , Punta Uva y Manzanillo.
Si conoces algún otro lugar de Costa Rica, te invitamos a dejar tu recomendación en la sección de comentarios. Del mismo modo, te recomendamos nuestro post “El Salvador, el Pulgarcito de América”.
